En este programa número 33 de Alegría Libertaria, entrevistamos a Carmelo Varela Espinosa y Paz Moreno, compañero y compañera del Proyecto de Autogestión de Vida Kalmekak Julio López Chávez, que, junto a otros compañeros y compañeras, están llevando adelante en Ocotitlán, en el Estado de Puebla, México.
Conversamos sobre la construcción de otro modo de vida con la puesta en valor de las prácticas y saberes de la gente, la horizontalidad, la creatividad, la historia del pueblo, vivencias personales y colectivas, el carnaval, economías populares y formas de organización, satisfactores directos, y muchas cosas más que fuimos entrelazando con música seleccionada por Carmelo y Paz y que guardan relación con los diferentes caminos que lo largo de muchos años hicieron al andar.
Este proyecto sigue siendo parte de tantos otros que, desde distintas geografías y ritmos de experiencia, redefinen la transformación social que acontece en las formas de vida, en el presente y en el cotidiano vivir.
“Se pueden hacer muchas cosas por amor, por el gusto de hacerlas, y no bloquearnos ni cerrarnos. Se trata de abrir los espacios para poder lograrlo.”
“Tenemos nuestro propio tiempo, nuestro propio espacio.”
En el programa nº 20 de Alegría Libertaria, recogemos una charla que impartió Ani Pérez Rueda en la UAM, organizada por la FEL, sobre lo que es la investigación militante y la pedagogía libertaria. Ani Pérez Rueda es una de las autoras del libro «Educación sin propiedad» (ed. Volapük), coordinado por Javier Encina, Ainhoa Ezeiza y Emiliano Urteaga.
El anarquismo ha concedido siempre mucha importancia a la educación.
En primer lugar, como medio para combatir la deshumanización a la que nos someten las estructuras de poder, para deconstruirnos y desaprender actitudes, valores, discursos y prácticas que impiden nuestra conquista de la libertad.
En segundo lugar, como medio revolucionario para la transformación social. Si queremos una sociedad nueva, es preciso educar personas capaces de crearla y vivir en ella, capaces de tomar conciencia de la necesidad de revolución.
Sin un movimiento de ideas compartidas previo no se pueden producir ni mantener las grandes transformaciones sociopolíticas. Por ello, posicionándose en un plano diferente a los dos modelos de educación dominantes (la educación religiosa y la laica estatal), a finales del siglo XIX y principios del XX las anarquistas comenzaron a plantear experiencias pedagógicas autogestionarias con el fin de educar personas que luchen por crear una sociedad nueva, rebelarse contra todo tipo de opresión y conquistar la libertad.
Música Sin escaleras era mi escuela – La Excepción
Sintonía: Alegría – Albertucho Programa bajo licencia CC-by-sa-nc a excepción de la música. Uso educativo.