Este programa número 79 de Alegría Literaria, de nuestra radio libre online Alegría Libertaria, es una reposición del programa número 25 en recuerdo a Miguel Hernández.
Después de una presentación en la que contamos un par de anécdotas, vamos leyendo poemas suyos, intercalándolos con poemas musicalizados.
En este programa número 41 de Alegría Libertaria, Javier Encina y Ainhoa Ezeiza traemos algunos sucesos que pensamos que pueden ayudarnos a reflexionar y comprender qué pasó con el Partido Comunista de España (PCE) al final de la Guerra Civil española y en la lucha antifranquista. Comienza con la muerte de Miguel Hernández (¿Quién fue el responsable de su muerte?) y termina con el asesinato de Julián Grimau.
Es un programa extendido del segmento «Sé de un lugar» del programa «Novedades Decadentes», que se emite en Radio Topo los miércoles, de 21:00 a 22:00, en el 101.8 FM de Zaragoza o por streaming: directo.radiotopo.org
En este programa número 28 de Alegría Literaria, os traemos un cuento de Ignacio Aldecoa escrito en 1953: «Salir de pobres». Antes del cuento, os contamos un poco sobre Aldecoa y el contexto sociopolítico y económico de la época.
Aprovechamos para deciros que vamos a recuperar este programa en esta nueva etapa en la que tendrá una frecuencia semanal y una duración máxima de una hora. Además, os animamos a que participéis en él con vuestros audios. Nos escribís a ilusionismosocial@gmail.com y os contamos cómo.
José Ignacio de Aldecoa e Isasi nació el 24 de julio de 1925 en Vitoria-Gasteiz (Araba), en una familia de la burguesía de la capital alavesa. Fue hijo de Simón de Aldecoa y Arbulo y de María Carmen Isasi y Pedruzo. Fue sobrino del pintor Adrián Aldecoa.
Estudió bachillerato en un colegio Marianistas de Vitoria y en 1942 se marchó para estudiar Filosofía y Letras en la Universidad de Salamanca, donde coincidiría con Carmen Martín Gaite, compañera de generación. Se trasladó entonces a Madrid para doctorarse allí. Huésped en una pensión del centro de la ciudad, comenzó a frecuentar las tertulias literarias de los cafés Gijón, Lion, etcétera, donde conocería a otros escritores de posguerra como Jesús Fernández Santos, Rafael Sánchez Ferlosio y Alfonso Sastre.
Aldecoa, aficionado a los toros y el boxeo, enamorado del mar a pesar de ser vasco de tierra adentro, y recordado por varios de sus amigos y biógrafos como un vitalista, incansable fumador y bebedor, murió de un paro cardiaco, víctima de una úlcera de estómago a los cuarenta y cuatro años de edad.
El conjunto de su obra narrativa sigue la corriente neorrealista, iniciada en España en la década de 1950, abundando en la visión literaria de los desfavorecidos y desamparados. Adaptó el riguroso realismo anglosajón a la literatura española, de forma que sus cuentos poseen el sabor de una experiencia realmente sentida y vivida, gracias a su agudas dotes de observador y a su gran contenido humano. Casi siempre escoge a gente humilde cuya cotidianeidad expone con ternura, dejando que el contenido social se deduzca naturalmente de la humanidad de su propia visión.
Algunas obras suyas fueron adaptadas al cine y televisión con guiones firmados por él mismo («Young Sánchez», «Quería dormir en paz»…) o por otros autores («Los pájaros de Baden-Baden», «Con el viento solano»…).
El cuento que vamos a escuchar se titula «Seguir de pobres» (1953) (narración de Ainhoa Ezeiza para Radio Alegría Libertaria). Con este cuento recibió el premio de la revista Juventud en 1953. En el cuento se escucha esta copla que configura el título del cuento.
Al marchar a la siega entran rencores trabajar para ricos seguir de pobres.
Este cuento a veces se ha encuadrado en la política del PCE de reconciliación nacional de 1956:
«En la presente situación, y al acercarse el XX aniversario del comienzo de la guerra civil, el Partido Comunista de España declara solemnemente estar dispuesto a contribuir sin reservas a la reconciliación nacional de los españoles, a terminar con la división abierta por la guerra civil y mantenida por el general Franco».
Pero eso significa no comprender el contenido del cuento que se mueve entre el drama y la ternura de unos jornaleros que han conseguido sobrevivir a la guerra civil, y que siguen recorriendo unas tierras en manos de los mismos dueños, amparados como siempre, como ahora, por el Estado y la Iglesia. Tal vez no es la incomprensión del cuento lo que lleva a esta explicación, sino la necesidad de los traidores a lxs pobres de arrebatarles cualquier posibilidad de hacer/pensar/sentir algo diferente, y así conseguir y apuntalar en la actualidad lo que el cuento denuncia en 1953: el seguir de pobres ya no en una dictadura sangrienta sino en una «democracia moderna», que tiene su raíz en aquella política del PCE de 1956 de «reconciliación nacional» y en aquellos cárteles de las Cajas de Ahorro que prometían futuro y progreso.
Un cuento lleno de solidaridad cotidiana entre jornaleros que no pueden parar de andar con alpargartas rotas, como mi abuelo Laureano…